Imprevisibilidad. Nueva poesía con comentarios hacia todo lo que no os esperais escuchar. Porque, pudiendo hablar sin que nadie me escuche, ¿es posible que me calle? No. Porque el hecho de que esté comiendo cacahuetes ahora no me hace peor persona que vosotros, y lo sabeis, y por eso teneis miedo!! Y yo sé que lo sabeis, y sigo comiendo. Todos os agachais al verme pasar frente a vuestra ventana porque no quereis hablar conmigo, pero idiotas! la luz refleja en el cristal y aunque quisiera no podría veros! La gente se esconde por todo.

Y así funciona el mundo, unos comen cacahuetes mientras otros se cagan de miedo. Y si quiero saludar a un tio dándole dos besos, lo haré, porque soy libre, no soy cómo ese tucán surafricano del zoo que ha sido capturado en la selva y que os mira, no soy un tucán!! Me pido el leopardo.
Esta poesía va dedicada a todos los que pensaron alguna vez que el Podrido era o es previsible.
La producción de poesía ha estado parada un tiempo. Pero bueno, vamos poco a poco. Seguro que mucho se lo preguntaban, o quizás ni se dieron cuenta. Ya lo sabía. Los previsibles ahora sois vosotros.

Un abrazo para todos los niños del mundo!
Y por supuesto a todos los judios!!